Luis es una persona empática, dinámica y con ganas de seguir aprendiendo sobre la fisioterapia. Le gusta el deporte y viajar.
¿Cuándo te diste cuenta de que querías ser fisio?
Desde los 14 años supe que me debía dedicar a algo relacionado con la salud ya que soy diabético y llevo acudiendo al médico desde los 3 años y siempre he sentido esa conexión hacia lo sanitario. Después a los 16 ya me di cuenta que lo más atractivo era la fisioterapia.
¿En qué estás especializado?
Estoy especializado en terapia manual avanzada, ejercicio terapéutico y estoy empezando a especializarme en neurología.
¿En qué consiste tu trabajo?
Mi trabajo consiste en rehabilitar lo máximo posible a los pacientes y de esta forma conseguir el estado de bienestar del paciente.
¿En qué medida es importante la educación con la salud?
En gran medida ya que prevendría gran cantidad de lesiones y de recaídas.
¿En qué piensas cuando estás tratando a un paciente?
En los objetivos, en su bienestar y en cómo adaptar el tratamiento a sus necesidades.
¿Cuál es la parte más gratificante de la profesión?
Ver la ilusión de los pacientes cuando consiguen sus metas.
¿Cuál es la clave para ser un buen fisio?
La escucha activa del paciente.
Para terminar, dinos la frase que más encaja contigo como fisioterapeuta.
Considero que la vocación forma parte de marcar la diferencia como fisioterapeuta.
