UrbanFisio • 05 November 2020
Me llamo Gonzalo, soy fisioterapeuta graduado en la Universidad Pontificia Comillas, en la Escuela de Enfermería y Fisioterapia San Juan De Dios. Juego al baloncesto, tenis y pádel y me gusta pasar tiempo con la familia y amigos. Tengo don de gentes, soy sociable y sobre todo se escuchar.
Es cierto que yo hice otra carrera que no llegué ha acabar porque me di cuenta de que no era lo que realmente me gustaba. La fisioterapia siempre me llamó mucho la atención y decidí dar el paso y dedicarme a algo que realmente me guste, como es esta profesión, por la satisfacción que te da ayudar a los demás.
El objetivo de un fisioterapeuta es mejorar la calidad de vida de las personas, ya sea mediante tratamientos de terapia manual o ejercicios. Para conseguir esto necesitamos diagnosticar bien, plantear un tratamiento individual y específico para cada persona, una buena sintonía con el paciente y sobre todo tener en cuentas sus características sociales y laborales. Por ello la buena comunicación y la confianza mutua son indispensables.
La educación en salud es prevención a largo plazo y por lo tanto conseguir la mejoría de nuestros pacientes. Me parece un tema muy importante que hay que tratar durante la sesión para que los pacientes lo interioricen y aprendan cuanto antes para evitar futuras lesiones.
Lo más importante es crear un vínculo de confianza, primero para que el paciente se sienta seguro y después para que seas eficaz. Esto te ayuda a comprender mejor a tu paciente, a hacer un buen diagnóstico de fisioterapia, un buen tratamiento y por lo tanto una pronta recuperación.
La parte mas gratificante es ver cómo tu tratamiento está funcionando, que el paciente se sienta mejor y ver que está feliz. Esto te da mucha confianza para futuros pacientes y saber que has hecho las cosas bien.
No creo que exista solamente una clave. Lo más importante para ser un buen fisioterapeuta es saber conectar con las personas, establecer un vínculo de confianza teniendo en cuenta sus características tanto sociales como laborales, desarrollar un buen plan de tratamiento para cada paciente y tener ganas de seguir aprendiendo y formándote como profesional y persona. Este conjunto de cosas son las que te hacen ser mejor y dar una fisioterapia de calidad.
“La fisioterapia no es solo tratar, es también saber escuchar”.