Te presentamos al UrbanFisio Nickolas
¿Qué nos puedes contar sobre ti?
Hola. Me llamo Nickolas y tengo 35 años. Soy de Oviedo. Mi madre es estadounidense y me he criado entre dos culturas. Estudié la carrera de Fisioterapia en la Universidad de Vigo, en Pontevedra, Galicia. Me encuentro muy contento trabajando para UrbanFisio porque creo que es una empresa donde se apuesta por el tratamiento adecuado y por impulsar el verdadero papel y valor de la Fisioterapia, además de crear un ambiente donde los fisios nos sentimos muy a gusto.
¿Cuándo te diste cuenta que querías ser fisio y por qué?
Hasta los 16 años aproximadamente, tenía varias opciones en lo que se refería a mi futuro laboral, ya que tenía predilección por los estudios sanitarios, pero también me gustaba la docencia, el turismo, los idiomas y la creatividad gráfica. Aún así, a medida que fue pasando el tiempo y fui madurando, observé que lo que más me gustaba era tratar con la gente, y dentro de los estudios de ciencias, lo que más me gustaba era lo relacionado con la naturaleza y sobretodo con la salud.
No me veía a mi mismo como médico, y la Fisioterapia se vio de repente como una opción apasionante, ya que además, mis amigos y familiares me decían que se me notaba un talento y un instinto muy definido en esta profesión. Así pues, a los 18 años, rechacé cualquier otra opción de estudios que no fuese la de la Fisioterapia, y tanto fue así que, una vez terminado el bachillerato y las pruebas de acceso a la Universidad, esperé un año entero para poder estudiar lo que realmente quería, Fisioterapia. Descubrí además, que podía aunar grandes pasiones de mi vida: enseñar (educación para la salud), tratar a la gente y ayudarles, desarrollar mi creatividad, y practicar diferentes idiomas al tener un abanico de personas a las que tratar variada en el que pudiese haber extranjeros.
¿En qué consiste tu trabajo?
Acudo cada día a trabajar muy feliz y contento, ya que, fundamentalmente, ayudo a personas a mejorar su calidad de vida, a recuperarse, a disminuir sus molestias, a prevenir posibles lesiones y complicaciones, y les enseño educación para la salud. Soy una persona muy sociable y me encanta relacionarme y conocer gente nueva.
En esta profesión, el trato con las personas es muy estrecho. Al principio, escucho lo que el paciente me cuenta con detenimiento, le valoro para poder establecer un buen diagnóstico de fisioterapia, y siempre intento crear un ambiente muy agradable, distendido y relajado, desarrollando la empatía, para que el paciente se sienta a gusto y confíe en mi. Una vez conseguido esto, procedo al tratamiento que a mi parecer es el más indicado. Aún así, la valoración realmente no se acaba aquí, ya que durante el tratamiento a la persona, continúo valorando, pues a medida que se va tratando el cuerpo pueden aparecer nuevos aspectos a valorar, o puedes darte cuenta que el verdadero origen de su dolor está en otro lugar que pasó desapercibido anteriormente.
¿En qué medida es importante la educación con la salud?
Para mi, en materia de salud, la educación lo es todo. Ya que, básicamente, con una buena educación en este tema se previenen la inmensa mayoría de problemas de salud con las que luego nos encontramos. Y no hablo sólamente del punto de vista del fisioterapeuta.
Además, todos estamos bastante acostumbrados a que nos hablen de la higiene postural, de la ergonomía, de saber cómo levantar pesos, de cómo realizar una actividad con la técnica adecuada… y todo eso es cierto y se debe luchar porque siga así y se potencie; pero lo que nos cuesta un poco más entender y para mi es vital, es la educación para la salud a nivel emocional y mental, ya que muchísimos de los problemas físicos desarrollados por una persona que viene a que le realices tratamiento de Fisioterapia, tienen su origen en actitudes, pensamientos, estrés, preocupaciones, creencias sobre sí mismos, etc. y podemos aprovechar para revertir la situación y que estas emociones y pensamientos y actitudes cambien a positivo, para ayudar a resolver el problema mientras se trabaja también con la Fisioterapia y con la ergonomía, higiene postural…
Todo esto, como podéis observar, es también educación con la salud. Y sin ella, se puede solucionar el problema provisionalmente, pero si no existe una buena educación, el problema volverá a manifestarse en un tiempo, ya que no se ha tratado de raíz. Una buena inversión en educación para la salud ahorraría muchísimos costes, disminuirían drásticamente las bajas laborales, y se aumentaría la productividad.
¿En qué piensas cuando estás tratando a un paciente?
Pienso en qué técnicas y terapias puedo emplear para que se mejore lo antes posible. También pienso en cómo puedo hablarle para que se sienta más relajado, distendido y que confíe en mi y en la Fisioterapia. Quiero que el paciente disfrute de su tratamiento, y yo, como fisio, también disfruto de mi trabajo y doy gracias por poder trabajar en lo que realmente me gusta.
¿Cuál es la parte más gratificante de la profesión?
Para mi desde luego, el ver cómo la persona mejora, se va recuperando y se va sintiendo más contenta y segura de sí misma. Cuando existe una incapacidad bastante acusada, como puede ser un paciente politraumatizado, neurológico o que haya pasado por una operación seria, el ver cómo va mejorando día a día y compartir los avances entre el paciente y el fisio son algo que me producen una alegría y un orgullo enorme. También es muy gratificante que los pacientes sonrían cada vez que te ven, que te agradezcan el tratamiento, y que cuando te los encuentras por la calle, estén recuperados o no, se pongan muy contentos al verte y le digan a la gente con las que están. “Este es mi fisio”
¿Cuál es la clave para ser un buen fisio a domicilio?
Sentirte feliz con tu trabajo, que te guste, que estés a gusto, que tengas tacto, delicadeza, que tengas confianza en ti mismo, desarrolles la empatía y sobretodo que sepas escuchar. También es muy importante continuar formándote y estudiando, tener siempre una sonrisa y ser agradable con los pacientes. No necesariamente es mejor fisio quien más cursos tenga, mejor expediente haya tenido, o más aparatos tenga a su disposición, esto puede ayudar. Pero desde luego, si ejerce su trabajo con pasión, cariño, le pone muchas ganas y empeño y, como no, va ganando experiencia con los años y va mejorando, será un fisio estupendo.
El mejor complemento de la Fisioterapia es…
Esta pregunta está casi contestada con las preguntas anteriores, una buena educación para la salud, a nivel físico, emocional y mental, y todos los aspectos comentados anteriormente como claves para ser un buen fisio a domicilio.
¿Qué importancia tiene la empatía en el tratamiento con los pacientes?
Los fisios tenemos que saber cómo actuar, qué técnicas utilizar, saber manejar las diferentes situaciones, conseguir que el paciente confíe en nosotros y en la Fisioterapia. En muchas ocasiones, tenemos que calmar, tranquilizar o reconfortar al paciente, cambiar su “chip” para que consiga mejorar más rápidamente o a veces incluso para que empiece a mejorar. Todo esto no se puede conseguir si no se desarrolla la empatía. Y para que el paciente confíe en ti, es necesario que confíes en ti mismo.
Dinos la frase que más encaja contigo como fisioterapeuta
Soy muy afortunado y doy gracias a la vida por disfrutar de mi trabajo cada día. Parece mentira que ya hayan pasado más de doce años ejerciendo. ¡Me han pasado volando!
Esperamos que el UrbanFisio Nickolas Folgueras siga disfrutando de su profesión con nosotros.
UrbanFisio, Tu Fisioterapeuta Personal a domicilio.