Es muy popular el uso del frío cuando tenemos algún tipo de dolor, pero ¿sabemos realmente cuándo aplicarlo y por qué?
En este artículo trataremos de desvelar estas incógnitas y esclarecer cuándo es recomendable aplicar el frío y porqué.
La aplicación del frío con un fin terapéutico se denomina crioterapia, y es una terapia consistente en bajar la temperatura corporal hasta que se produzcan cambios fisiológicos en nuestro organismo.
Estos efectos son hemodinámicos, neuromusculares, antiinflamatorios y analgésicos.
EFECTOS DEL FRÍO SOBRE EL ORGANISMO
- Efectos hemodinámicos: retrasa la aparición del hematoma en una lesión muscular por la constricción de los vasos de los tejidos y la reducción del flujo sanguíneo.
Esto ocurre por un mecanismo reflejo del Sistemas Nervioso Autónomo, el frío actúa en la musculatura lisa de los vasos sanguíneos y en la excitación de las fibras simpáticas.
Si la exposición al frío dura entre 10-15 minutos y con una temperatura por debajo de 10ºC, aparece un mecanismo de defensa del organismo en el que produce una vasodilatación, por lo que comienza un ciclo de vasoconstricción-vasodilatación. Esto es lo que se conoce como efecto hemodinámico.
- Efectos neuromusculares: aumenta la viscosidad sanguínea, lo que reduce el metabolismo y la velocidad de conducción nerviosa, disminuyendo el dolor que está generando la lesión.
La sensación del dolor es menor, notando un alivio considerable. Lo que ocurre es un mecanismo de acción que bloquea total o parcialmente la transmisión de impulsos nerviosos de los nociceptores a la corteza cerebral debido al frío.
- Efecto antiinflamatorio y analgésico:la reducción del metabolismo va a producir un menor número de sustancias vasoactivas, lo que se relaciona con la disminución de la respuesta inflamatoria, reduciendo el edema y la inflamación que pueda existir.
PRECAUCIONES Y CONTRAINDICACIONES
La aplicación de la crioterapia es sencilla, pero es recomendable tener en cuenta una serie de precauciones para evitar complicaciones.
Las principales precauciones son:
- No utilizar el frío sobre heridas abiertas ni quemaduras
- No aplicar en zonas donde el nervio sea muy superficial
- Tener un especial cuidado con los fenómenos de congelación, controlando los tiempos de aplicación, que como ya hemos comentado, no debe exceder los 15 minutos.
Existen una serie de contraindicaciones:
- Enfermedades vasculares periféricas
- Arterioesclerosis
- Hipersensibilidad e hiposensibilidad al frío
- Lesiones dermatológicas
- Enfermedades cardiovasculares graves

¿CUÁNDO SE APLICA EL FRÍO?
El frío principalmente se utiliza en lesiones traumáticas agudas o en patologías que cursen un proceso inflamatorio y doloroso (esguinces, tendinitis en fase aguda, traumatismos…), debido a las propiedades analgésicas y antiinflamatorias, y la capacidad de disminuir los procesos metabólicos y la formación de edemas.
Lo más recomendable son bolsas de geles fríos o “cold-packs”, o en el caso de que no tengamos, una bolsa de guisantes congelados nos va a valer. La aplicación normalmente será de 15 minutos, 3 veces al día.
Por otro lado, si nos vamos al ámbito deportivo, los baños de agua fría van a ser muy beneficiosos para la recuperación post-competición. Tras un ejercicio físico intenso, se llenará la bañera de agua fría con hielo, y nos introduciremos alrededor de 15 minutos en la bañera tratando de relajar nuestro cuerpo. Esto favorece el retorno venoso y la recuperación muscular.

Si has sufrido alguna lesión traumática o tienes cualquier tipo de patología, no lo dudes, contacta con nosotros y te asesoraremos sobre el tratamiento Fisioterápico a seguir.